Creación de un centro internacional de investigación en energía solar en Antofagasta
Berlín, el 9 de mayo 2018.
Chile busca fomentar el desarrollo tecnológico para la industria fotovoltaica. En ese ámbito, en Antofagasta se lanzará un centro de investigación solar, mediante un consorcio público-privado. El AtaMos-Tec (Atacama Module System Technology Center) tiene como primer proyecto investigar en células solares bifaciales, con el plan de poder incrementar la generación eléctrica y a largo plazo y facilitar la producción chilena de las células.
Los socios de esta cooperación son el International Solar Energy Research Center ISC Konstanz con el Instituto Fraunhofer Energía Solar, el Instituto Nacional de Energía Solar (CEA INES) de Francia y SERC de Chile. Como socio financiero, CORFO invierte 10 millones de Euros en la instalación y operación del centro. Del lado privado, se comprometen ocho empresas chilenas a invertir 4,2 millones de Euros adicionales. Se espera que después de cinco años de operación el centro se autofinancie.
La idea básica del AtaMos-Tec es la transferencia tecnológica así como el desarrollo de nuevos productos adaptados a las condiciones climatológicas, de altitud y radiación del desierto chileno. En concreto, se trata de células solares bifaciales (de doble cara) para Chile. El ISC Konstanz, con quién Chile ya mantiene vínculos investigativos desde el año 2007, posee evidencia científica que la utilización de células solares bifaciales, especialmente en zonas desérticas y de alta radiación, incrementa la generación eléctrica en un 30%, ya que aprovecha la captación de radiación reflectante proveniente del suelo. Adicionalmente, la utilización de esta tecnología en paneles modulares verticales, incrementa la producción eléctrica en un 20%.
Un objetivo a largo plazo sería la fabricación de nuevas versiones de células bifaciales adaptadas especialmente a estas respectivas condiciones y que se podrían exportar a otros países de condiciones climáticas y de radiación similares.Según lo planificado, AtaMos-Tec se inaugurará fines del 2019 y, en su momento de plena operación, dispondrá de un equipo científico de 25 a 30 investigadores.