Adolescentes chilenos que ganan segundo lugar en Olimpíada de Genios en Nueva York se reúnen con Embajador Valdés
Felices y ya pensando en sus próximos desafíos, ambos jóvenes viajaron hasta Washington DC antes de regresar a Chile, para conocer la capital de Estados Unidos, gracias a una invitación que les extendió un empresario chileno.
Las escasas preguntas que el jurado le hizo a Felipe Islas y Luciano Imas, tras su exposición sobre sus descubrimientos de las propiedades antibióticas de la hoja del olivo hizo que los dos adolescentes del Instituto Andrés Bello de Talca comenzaran a soñar con obtener algún galardón en la Olimpíada Mundial de Genios realizada en Nueva York, y que por primera vez recibía a un equipo de jóvenes científicos chilenos.
La corazonada era real. Los jueces no hicieron mayores preguntas porque la exposición en inglés, que hicieron estos dos jóvenes de 15 años, fue tan contundente que no era necesario hacer consultas. El resultado no se dejó esperar: Se quedaron con el segundo lugar y una medalla de plata, en una competencia en la que se presentaron 790 proyectos científicos provenientes de 71 países.
Felices y ya pensando en sus próximos desafíos, ambos jóvenes viajaron hasta Washington DC antes de regresar a Chile, para conocer la capital de Estados Unidos, gracias a una invitación que les extendió un empresario chileno.
Recién llegados a DC, Luciano y Felipe acompañados de su profesor y mentor Fredy Segura, llegaron hasta la Embajada de Chile donde los esperaba el Embajador Juan Gabriel Valdés.
Allí, contaron cómo a los 12 años ingresaron al taller científico que el profesor Segura comenzó a impartir en su colegio, cómo en un par de años y tras avances en su proyecto viajaron por primera vez a Santiago, para presentarse y ganar el primer lugar en las Olimpiadas de Proyectos Científicos de Chile.
Nunca habíamos ido a Santiago, así como ahora, nunca habíamos salido fuera de Chile, cuentan los adolescentes que destacan el apoyo que siempre recibieron de sus padres y de su colegio y profesor para desarrollar su trabajo.
Nos presentamos con un pendón con muchas imágenes y el texto lo aportamos nosotros. Nos preparamos para que nuestro inglés fuera lo más fluido posible, y nos encantó darnos cuenta de que todos respetaron nuestra exposición, aunque el inglés no fuera perfecto. Nos sentimos muy respetados, dijeron los jóvenes, quienes el 26 de junio regresaron a Chile a seguir cosechando éxitos.