Rescatan película de Raúl Ruiz guardada por décadas en Universidad de Duke
“La telenovela errante” es el nombre de la cinta del director chileno Raúl Ruiz, filmada en 1990 como parte de un taller de realización y actuación cinematográfica y cuyo montaje y post producción nunca fue terminado.
Con la firma de un acuerdo formal y la visita de la productora y actriz Chamila Rodríguez y la asistencia del Agregado Cultural de Chile en Washington, Roberto Brodsky, se materializó la primera etapa del proyecto de rescate del film "La telenovela errante", de Raúl Ruiz, que se conservaba en los archivos de la Universidad de Duke desde mediados de los años ‘90.
Filmada en 1990 con actores y paisajes chilenos después de muchos años de exilio y trabajo en París, la película de Ruiz quedó guardada en los archivos de Duke junto a un conjunto de otros materiales del cineasta que ahora tendrán una versión definitiva gracias al proyecto de recuperación y post-producción que lidera Chamila Rodriguez con el apoyo del Fondo de Fomento Audiovisual y la supervisión de Valeria Sarmiento, viuda de Ruiz.
Cuidadosamente conservados en la sección de manuscritos y libros raros de la David Rubinstein Collection de la U. de Duke, los siete rollos de material fílmico fueron entregados por Craig Braden, (en la foto) archivista audiovisual de la colección, para su traslado a Chile y procesamiento en la Cineteca Nacional.
Consultado al respecto, Roberto Brodsky explicó que la visita a los archivos de la Universidad de Duke fue el primer paso práctico en la recuperación de la cinta de Ruiz, luego de que la directora del proyecto, Chamila Rodríguez tomara contacto con los encargados de la conservación y del material fílmico.
“Tras la firma del acuerdo de préstamos siguió una charla con estudiantes y académicos de Duke, donde se proyectaron fragmentos del film rodado en 1990 y se destacó la importancia de esta nueva película de Raúl Ruiz tras el exilio, con actores, paisajes y conflictos chilenos”, contó Brodsky.
27 AÑOS DE HISTORIA
En 1990, Raúl Ruiz creó un taller de realización y actuación cinematográfica cuyo objetivo era filmar una película, la que en sus palabras quería “postular que Chile es una teleserie. Que la realidad chilena no existe, sino que la realidad más bien es un conjunto de teleseries”.
La experiencia contó con la participación de actores, periodistas, escritores y también “mirones” y se desarrolló durante seis días. Sin embargo, el montaje y postproducción de la cinta quedó sin terminar en la Universidad de Duke.
Gracias a este proyecto de rescate del film, 27 años después de su rodaje, los rollos de 16 mm de material fílmico ya se encuentran en la Cineteca Nacional de Chile, en perfecto estado de conservación, y a la espera de concluir sus etapas finales para poder dar paso a su esperado estreno.
