Declaración de la OCDE, la IEA, el ITF y la NEA para la COP21

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El miércoles pasado, la OCDE publicó una declaración en conjunto con la Agencia Internacional de Energía (IEA), el Foro Internacional del Transporte (ITF), y la Agencia de Energía Nuclear acerca de la 21° Conferencia de las Partes (COP21) de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en París, que se está realizando en París entre el 30 de noviembre y el 11 de diciembre de 2015.

Esta es una traducción no oficial del documento:

"El mundo espera un nuevo acuerdo ambiental de la Conferencia de París, que transforme nuestro camino hacia el desarrollo. El éxito de la COP21 puede dirigir y acelerar la transición hacia un futuro más limpio y seguro, consolidando el crecimiento y desarrollo sustentable. El objetivo de alcanzar un mundo con bajas emisiones de carbono y un ambiente resistente al cambio antes del final del siglo, ya no es solo una esperanza—es una necesidad.

La transformación del sistema económico global es esencial para cumplir nuestras metas comunes con respecto al cambio climático, el desarrollo, la economía, la energía y la seguridad. Nuestras economías son dependientes a los combustibles fósiles. Para sobrepasar esta dependencia al carbono, los países deben implementar políticas climáticas firmes, incluyendo aquellas que aumentan el precio del carbono y que eliminan los aproximadamente 600 mil millones de dólares de apoyo que reciben los combustibles fósiles todos los años. Cómo argumentan nuestras organizaciones en Aligning policies for a low carbon economy, los gobiernos también necesitan diagnosticar y responsabilizarse de las discordancias en sus políticas económicas, las que impiden y aumentan el costo de esta transición.

La reunión de líderes en París para la COP21 debe enviar una señal decisoria indicando que ha llegado la hora de avanzar de los compromisos a la acción. Necesitamos reducciones importantes y sostenidas de las emisiones de gases de invernadero en las próximas décadas para limitar el riesgo climático, lo que significa que los países necesitan acelerar sus esfuerzos de reducción de emisiones. Necesitamos aumentar la resistencia de nuestras economías, especialmente las de los países menos desarrollados y vulnerables.

La propuesta de Contribuciones Previstas y Determinadas a Nivel Nacional (INDC) hecha por más de 170 Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, cubre acciones de adaptación y reducción de emisiones de carbono para el año 2020. Esta representa un gran paso adelante, pero no logra la corrección de camino necesaria para cumplir con nuestros objetivos climáticos comunes, como lo muestran estudios hechos por el IEA* y la OCDE**. Por tanto, las INDCs deben ser vistas como bases importantes desde las cuales se deben constituir propuestas más ambiciosas, resultando en que los acuerdos y decisiones que emerjan de la COP21 sean aún más significativos.

Además de proponer metas fiables a largo plazo, el éxito de la COP21 se definirá en base a su habilidad de:

    • Generar dinamismo y consolidar la visión de bajas emisiones de carbono a través de mecanismos que determinen, fortalezcan e impulsen contribuciones regulares de mitigación. Las emisiones necesitan disminuir prontamente y avanzar hacia cero emisiones netas antes del final del siglo. Esto requiere un portafolio de tecnologías de baja emisiones de carbono, un compromiso firme de dirigirse hacia la eficiencia energética y la innovación, el desarrollo y uso de nuevas tecnologías, y la de-carbonización del transporte, que engloba 23% de las emisiones globales de CO2;
      • Aumentar la resistencia y proteger a los más vulnerables a través de apoyo financiero y técnico, del desarrollo de habilidades y del aumento en el acceso a energía. Los países desarrollados deben cumplir su compromiso de movilizar 100 mil millones de dólares para el año 2020 a los fines de apoyar las acciones de los países en vía de desarrollo***;
        • Proveer transparencia a través del monitoreo, la emisión de informes y la verificación mecanismos que construyen el entendimiento y la confianza en los procesos nacionales hacia sus objetivos de mitigación y adaptación;
          • Crear un sistema de redición de cuentas mutua respecto a finanzas, tecnología y el desarrollo de capacidades, incluyendo reformas políticas que generen un ambiente promovedor tanto para la inversión, como también para un desarrollo resistente y bajo en emisiones de carbono;
            • Trasmitir una señal firme a los numerosos tomadores de decisiones no-gubernamentales—especialmente las empresas, los gobiernos regionales, las ciudades y el sector financiero. Ellos necesitan la confianza para planificar e invertir de forma provechosa si la transición ha de ocurrir.

            Necesitamos un resultado de París que vaya realmente acorde a la magnitud del desafío al cual nos enfrentamos y a las oportunidades que están a nuestro alcance. La OCDE, la IEA, el ITF y la NEA están comprometidas en apoyar a los países miembros para lograr esta transición y le urgen a los gobiernos tomar las medidas necesarias para que la COP21 sea un éxito".

            Para leer la declaración original en inglés, haga click aquí